10 octubre, 2010

Tras más de 20 años de espera, los vecinos de Caborredondo ya tienen parada de autobús.

Los que entonces fueron niños, hoy son los padres de los pequeños que este nuevo curso escolar tendrán dónde cobijarse.
Durante más de 20 años, los vecinos del barrio Caborredondo, en Oreña, llevan demandando una marquesina donde poder esperar el autobús.

“Cuando uno espera, el tiempo pasa despacio, pero esta espera ha sido realmente larga, nos ha costado más de 20 años”, cuenta una vecina, que recuerda los días de invierno bajo el paraguas.
Por su parte, el edil popular Enrique Bretones, muestra su satisfacción al ver resuelta una necesidad tan básica como esta. “ Tras varias gestiones para intentar emplazar y dar ubicación a la marquesina, una vez más, gracias a la colaboración de los vecinos ha sido posible”

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